En la búsqueda constante de un ejercicio del coaching basado en las evidencias, hemos defendido y promovido modelos de aplicación que se ajusten a una metodología de estricto carácter científico, un sistema que defina claramente los principios sobre los que se sustenta, los mecanismos de control que reglan su
funcionamiento y las herramientas a través de las cuales podemos medir con la mayor certeza posible el logro de objetivos y los resultados del proceso de coaching en sí.
La praxis del coaching sea cual sea su especialización se mantiene aún transitando las fronteras entre varias disciplinas de las que toma herramientas y metodologías para sí, un proceso que se ha consolidado al pasar de los años convirtiéndola en una actividad profesional que a nivel internacional y localmente, ha desarrollado los mecanismos de regulación y garantía tanto para los profesionales como para los clientes.
Mucho se ha discutido sobre lo que diferencia al coaching de otras prácticas profesionales en las profesiones de la salud, del mentoring o de la dirección; más aún se ha debatido sobre lo que lo acerca a la psicología, sociología, antropología y/o filosofía. Lo cierto es que como herramienta de gestión en el proceso de potenciación de la persona y la consecución de objetivos el coaching bebe de diferentes fuentes que según sea su aplicación se incorporan a su marco teórico y práctico.
Como rigurosidad aplicada desde principios de este siglo surgió un movimiento y disciplina a la vez, que intentaba fusionar en la actividad de acompañamiento la visión de un individuo sano con la aplicabilidad de un sistema concreto, sencillo y efectivo que permitiese alcanzar objetivos claramente definidos, empleando técnicas y procedimientos derivados de las propuestas, teorías y hallazgos experimentales de las ciencias de la salud dedicadas a tal tarea.
La Coaching Psychology es una respuesta a las necesidades de atención y apoyo en los procesos que tienen como objetivo primordial el incremento del bienestar y rendimiento de la persona, a cuyo efecto ha fusionado los aportes de las escuelas norteamericanas, europeas y sudamericanas de coaching con las técnicas y procedimientos derivados de las corrientes psicodinámicas, cognitivo-conductuales, sistémicas, estratégicas y de la psicología positiva amalgamando una sólida estructura profesional que tiene como eje central el ejercicio basado en la evidencia.
La neurociencia moderna ha venido produciendo como nunca antes hallazgos que están cambiando la perspectiva y visión que teníamos de procesos psicológicos básicos, y por ende, nos acerca a nuevas formas de abordaje de la situación de acompañamiento. El manejo de las herramientas esenciales del coaching, el tránsito por las fases del proceso y el desarrollo de las competencias de éxito del coach, obtienen un sustento de aplicación en conceptos como: neuronas espejo, plasticidad cerebral, intuición, toma de decisiones y muchos otros.
El modelo competencial desarrollado y contrastado por Leading Change – Institute for Coaching Psychology (5+4=9)TM es el más claro ejemplo de integración de los hallazgos de las tres disciplinas que mayor cantidad de evidencias han producido en la investigación y validación de las disciplinas de acompañamiento. 5 herramientas esenciales, 4 fases de proceso y 9 competencias, representan tal cual en el desarrollo de la maestría de algún arte u oficio el camino a recorrer hacia la excelencia en la práctica del coaching.
El Dr. Paul Brown de manera excepcional este 01 de Marzo de 2012 estará en Madrid explicándonos como los hallazgos de su experimentación en neurociencia han impactado en el desarrollo de un modelo efectivo aplicado al coaching y el mnagement.