
EMOCIÓN “LA ALEGRIA“
He elegido esta emoción por su capacidad de movilización, por ser contagiosa, por lo que es capaz de provocar tanto en nosotros como en los demás y sobre todo porque es la emoción que he experimentado a través de los clientes y de mi misma que más veces se persigue.
Alegría proviene del latín Alicer o alecris = vivo y animado
“La alegría es el significado y el propósito de la vida, el sentido de la existencia humana”. Aristóteles.
A nivel fisiológico es capaz de producirnos cambios hormonales, risa alegre atenuando nuestro estré , liberamos tensiones acumuladas consiguiendo una activación general que en muchos casos provoca que no podamos estar quietos, por lo que la convierte en una emoción muy importante para nuestra salud.
Cuando estamos alegres lo reflejamos incluso en nuestra forma de vestir, nuestro tono de voz, etc..
A nivel psicológico facilita nuestras relaciones de comunicación, siendo capaz de regular el comportamiento hostil de los demás hacia nosotros y haciendo que nos sintamos más proclives a colaborar y prestar ayuda a los demás cuando la necesitan, favoreciendo nuestras relaciones interpersonales.
Puede hacernos más creativos, energéticos, exitosos, etc. Y esto no solo es importante para nosotros mismos sino también para el entorno que nos rodea tanto a nivel profesional como personal.
Podemos sentir alegría cuando alcanzamos una meta, vivimos una experiencia enriquecedora o conseguimos atenuar un malestar que sentíamos.
El canal principal de expresión son los gestos faciales, lo que resulta en una sonrisa que puede llegar a la carcajada siendo capaz de activar nuestro organismo entero manifestando ganas de bailar o de saltar entre otras.
¿Qué cosas tienen a capacidad de quitarme la alegría? ¿Cómo permanecer alegre ante las situaciones que me quitan la alegría? ¿Qué cosas me hacen fluir?¿Qué hago mejor?¿en qué soy bueno?¿Qué haces para sentirla cuando la necesitas?.
Porque no usar el poder que nuestro cuerpo tiene sobre las emociones poniéndonos a bailar por ejemplo cuando estamos tristes, escuchando música que para nosotros tenga un significado alegre, pensar en algo que nos haya hecho reír alguna vez, busca a alguien que nos necesite y hacerle compañía, son algunas de las respuestas que se me ocurren.
Cómo resumen, quiero concluir mi trabajo con una poesía, escritura que en tantos casos nace desde la emoción.
Mi ración de alegría – Carmen Martín Gaite
Defiendo la alegría,
la precaria, amenazada,
difícil alegría,
al raso, limpia, en cueros,
mi ración de alegría.
No me arrastréis al pozo
de las verdes culebras.
No os arrojo a la cara mi alegría,
os la tiendo tan sólo
como una débil luz, como una mano.
No es ningún baluarte
ni ningún ofensivo privilegio,
es mi único utensilio cotidiano,
mi tela de labor.
No tengo otra bandera
y ostenta unos colores ya un poco desteñidos;
mirad que la levanto a duras penas,
contra viento y marea,
sin sombra alguna de provocación.
Es parcela pequeña, minifundio,
terreno sin cercados ni aparceros
que aro, riego y abono por mí misma,
con fe, de sol a sol.
Tomad el pobre o rico,
el cuestionable fruto
que desde ella os ofrezco,
pues sólo desde aquí
os consigo mirar, ayudar,
entender,
poner tal vez en claro alguna cosa.
No me la reprochéis ni adobéis de negrura
como un reducto inmundo, segregado;
ved que no la defienden
ni pinchos ni alambradas
y que podéis pasar aquí conmigo
al sol.
No me arrastréis al pozo
de las verdes culebras
Chelo Pulido Román
Coach Profesional Ejecutiva y Organizativa
1 Comentario
-
Coincido contigo y con Aristóteles en que la alegría es una pieza crucial para sentirnos vivos. La felicidad parece haberse instaurado como el fin máximo en nuestras vidas, si bien no consigo imaginarme un mundo feliz sin alegría. Gracias por compartir la tuya ?