
“Creencia Limitante”
Hacia el año 1991-1992, estando en mi trabajo en una empresa familiar, en la que se envasaban aceites comestibles con marcas propias, y ante la sugerencia al propietario y persona que decidía en última instancia de la opción de añadir una sección de aceite de oliva virgen extra, que en ése momento no se trabajaba, la respuesta fue que se trataba de un producto de relativo alto valor adquisitivo, lo que conllevaba a tener que poner en el mercado un aceite no concordante con la línea en vigor, y consecuentemente la respuesta de la clientela sería de rechazo porque el consumidor final no lo pagaría. La idea sugerida NO se puso en marcha.
Razones por las que creo que es una creencia limitante:
– Se da por sentado que un producto de mayor precio no se va a vender
– No dar la oportunidad de testar que un producto que no se trabaja pueda dar resultado
– Se impide la posible apertura a nuevos mercados, con lo que se niega el crecimiento.
– Se cierra el paso a la innovación
– Posibles incrementos de facturación a medio plazo se cortan
– Se limita la posibilidad de diferenciación con respecto a la competencia.
Alternativas potenciadoras:
+ Dar oportunidad a la clientela existente de probar el producto antes de salir al mercado, con lo que el juicio sería más certero.
+ Hacer un estudio de mercado, y analizar la diana final posible en cuanto a clientela y comprador final.
+ En caso de que la clientela existente no aceptase-entendiese el nuevo producto, estudiar si un público diferente por explotar sí lo pudiese desear, o bien crear la necesidad de ello.